El universo del 'anime' y el manga japonés se recrea en Albacete

Los hermosos personajes de ojos enormes y mirada brillante del manga y el 'anime' japonés están presentes, este fin de semana, en el recinto de la Institución Ferial de Albacete (Ifab). Por primera vez en sus más de diez años de celebración, las jornadas que organiza la asociación Nexus Outsiders desembarcan en el espacio de la carretera de Madrid y con un gran éxito de convocatoria, ya que son más de 2.000 personas las que están participando en las numerosas actividades que se han programado.

Albanime 2012 recrea el universo del cómic (manga) y las series (el 'anime') del país nipón, con referentes como 'One piece', de inspiración pirata, o 'Naruto', descrito como «un ninja adolescente, hiperactivo y ruidoso». Para el gran público y, sobre todo, la generación que roza los 40, ejemplos del género son también 'Mazinger Z', 'Heidi' -en su versión japonesa- y 'Candy, Candy'.

Así lo explicaba ayer Javier Avilés, presidente de Nexus Outsiders, una entidad que echó a andar en 2000 con un ciclo de cine en el Paraninfo de la Universidad de Castilla-La Mancha. Tras esa primera experiencia e imitando, a menor escala, el salón que anualmente se celebra en Barcelona, la asociación iría forjando Albanime, que en los últimos años ha tenido como escenarios el colegio Diego Velázquez y la Casa de Cultura 'José Saramago'.

Llegar en esta XII edición a celebrar las jornadas en el recinto de la Ifab ha sido todo un reto que ha sido posible gracias a la implicación del Ayuntamiento de Albacete, la Diputación y la propia Ifab, lo que ha permitido contar con un mayor número de propuestas que incluyen exhibiciones de jiu-jitsu, videojuegos, talleres de origami y 'cosplay', en el que los participantes se disfrazan con los trajes de sus personajes favoritos.

«Algunos pueden pensar que somos un poco raros, pero eso es porque no conocen lo que hacemos», decía Avilés, quien recordaba que en España ha costado más que calara esta cultura mientras que países como Francia «son grandes consumidores». Internet y las redes sociales han contribuido a extender esta tendencia, casi una filosofía de vida, entre jóvenes de todo el mundo.