(EUROPA PRESS)
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Castilla-La Mancha considera que la nueva Ley de Tasas, aprobada recientemente por el Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha y que será tramitada por las Cortes regionales en breve, generará nuevos gastos para los sectores agrícola y ganadero de la región.
Según la organización agraria, esta modificación no tiene más que un afán recaudatorio ya que incrementa algunas de las tasas que ya existían pero además, crea nuevas tasas lo que aumentará el gravamen de ciertas actividades de ganaderos y agricultores, ha informado UPA en nota de prensa.
Según ha indicado, en algunos casos donde ya existían tasas lo que se hace es incrementar el gravamen de las mismas, como ocurre en la prestación de servicios de diagnóstico, análisis y dictámenes en materia de agricultura: análisis de tierra, agua, fertilizantes o material vegetal.
Así, UPA denuncia la creación de nuevas tasas por expedición de documentación y certificados como guías de origen y sanidad animal o certificado oficial de movimiento y tramitación de peticiones de elementos de identificación animal (crotales, identificación electrónica).
También señala que aquellas que se soliciten para homologación de cursos y emisión y renovación de certificados o diplomas de capacitación en materia de bienestar animal así como nuevas tasas por autorizaciones y registros de empresas de alimentación animal o explotaciones ganaderas.
Finalmente, adviertes que se crean también nuevas tasas por prestación de servicios de diagnóstico, análisis y dictámenes en materia de ganadería.
Según UPA Castilla-La Mancha, "nos preocupa especialmente las nuevas tasas que se crean para el sector ganadero, un sector que está atravesando un momento complicado y que en vez de ayudarle, se le generan más gastos".
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