La carrera popular "Vuelta al Valle", que se iba a celebrar a partir de las 19:30 horas este martes en Toledo, finalmente fue suspendida debido a la falta de permisos, según el Ayuntamiento de la capital.
Sin embargo, los organizadores del evento, la Asociación de Vecinos "La Mezquita", se quejan de persecución política por parte del Consistorio toledano a Rubén Lozano, presidente de la asociación que, además, es militante del Partido Popular y asesor del consejero de Educación, Marcial Marín.La prueba, en la que iban a participar unos 300 corredores, fue suspendida en el último momento por la Policía Local de Toledo, que consideró que la seguridad de los corredores no estaba garantizada, ya que la carrera tenía previsto seguir un itinerario por vías municipales pero también por carreteras -como la de Cobisa- que no dependen del Ayuntamiento, en los que los policías locales no tienen competencias.Los momentos más tensos se vivieron cuando más de un centenar de corredores desafiaron a las autoridades y comenzaron a completar el recorrido sin autorización. Aunque lo hicieron por la acera y no hubo incidentes, al finalizar la prueba la Policía Local decidió trasladar a comisaría a Rubén Lozano, el organizador, por alteración del orden público.El concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Rafael Perezagua, ha asegurado a ABCque se trató de un "traslado a dependencias policiales debido a la apertura de la instrucción de un expediente a la organización de la carrera por poner en risgo la seguridad en el tráfico, porque los corredores cruzaron la Puerta de Bisagra después de subir por la calle Carreras, paralizando el tráfico rodado en toda la zona".Según ha podido saber EL DIGITAL, la Policía también investiga en estos momentos siLozano cometió alguna irregularidad al cobrar a los atletas la inscripción a la prueba sabiendo que no tenía los permisos necesarios para realizarse.
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