CASO MARI CIELO
La familia Cañavate volvió ayer a visitar el Palacio de Justicia de la capital y mantener una nueva reunión tras la absolución por parte de la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha de F.R. del delito por el fue condenado por un jurado popular a finales del pasado mes de noviembre, concretamente, a 15 meses de prisión por el homicidio de Mari Cielo Cañavate en octubre del 2007.Y si hace unas semanas los fiscales eran a quiénes iban a ver Antonio Cañavate y a su hija Esperanza, ayer a quién vieron fue al presidente del máximo órgano judicial de la región y a su vez presidente del tribunal cuyo dictamen dio lugar a la puesta en libertad de F.R. tras casi tres meses en la prisión de La Torrecica.Nada más salir y en un improvisado encuentro con los medios, el padre de Mari Cielo, explicó que en la reunión con Rouco no sólo le había dicho que «se ha equivocado en el caso de mi hija, a lo que él me ha contestado que miró y no hay suficientes pruebas cómo para mantenerlo en la cárcel», sino también lo que él piensa, es decir, «que este señor la mató y esto lo mantendré siempre, es decir, que la justicia se ha equivocado y con esto no se ha cargado sólo a Mari Cielo sino asimismo a 40 familias que me llamaban para comentarme que ahora sí que iban a reabrir sus casos».Y aunque Rouco también le ha dejado constancia de que «sentía por dónde estábamos pasando» y le ha explicado que «para su criterio y el de los otros dos magistrados un inocente no podría estar en la cárcel», Cañavate, por su parte, asimismo le ha aclarado que «él iba a seguir luchando, más aún, que le gustaría que otro magistrado le meta de dónde él le sacó, porque con esto no se para, más aún también le diría a su letrado defensor que no cante victoria que esto va a llegar y muy lejos».
Antonio Cañavate muestra su descontento al presidente del Tribunal Superior de Justicia por haber dejado en libertad al «asesino» de su hija
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