Juzgan a un hombre que atacó a otro con una katana

(EUROPA PRESS) -

   La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete juzgará este martes a F.L.V., para el que la Fiscalía le pide ocho años de prisión y 2.160 euros de multa al considerarlo presunto culpable de un delito de homicidio y de tres faltas de lesiones por atracar a otro con una katana en Casas Ibáñez (Albacete).

   La Fiscalía solicita, además, que indemnice a I.D. en 2.400 euros por las lesiones y secuelas, y a G.D. en 250 euros, a M.P. en 200 euros, y a M.C.O. en 200 euros, por sus respectivas lesiones.
   Según el escrito de acusación de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press, sobre las 07.00 horas del 1 de abril de 2012, el acusado, ciudadano rumano, se dirigió al domicilio que sus compatriotas G.D., I.D. y J.M.N., en Fuentealbilla (Albacete).
   Desde la puerta del referido domicilio, el acusado, portando un cuchillo de grandes dimensiones, profirió gritos dirigidos a sus compatriotas, diciéndoles "que le abrieran la puerta, que eran unos hijos de puta, que los iba a matar, que les iba a cortar el cuello", llegando a golpear insistentemente la puerta de la vivienda.
   Al final, el procesado, ante la negativa de los otros a abrir la puerta, se marchó del lugar. Sin embargo, posteriormente, sobre las 9.00 horas del día de los hechos, el acusado, que estaba en una cafetería de Casas Ibáñez (Albacete), en compañía de unos amigos, coincidió con G.D., I.D. y J.M.N., y se inició una breve discusión verbal entre todos ellos sobre lo ocurrido horas antes en Fuentealbilla.
   Entonces, el acusado sacó una katana de hoja puntiaguda y de 43 centrímetos de longitud que ocultaba en su espalda y, con ánimo de acabar con la vida de I.D., se la clavó en el pecho, alcanzándole en el esternón.
   Al presenciar lo ocurrido, todos los allí presentes, entre ellos G.D., J.M.N., M.P. y M.C.O., se abalanzaron sobre el procesado con intención de arrebatarle el arma, consiguiendo entre todos reducirlo y retenerlo hasta que se personaron los agentes de la Guardia Civil.
   Como consecuencia de estos hechos, I.D. resultó con lesiones en la pared de tórax y precisó puntos de sutura para la herida, de la que tardó en curar 8 días, que estuvo de baja. Le ha quedado como secuela una cicatriz que le ocasiona perjuicio estético ligero.
   También resultaron lesionados, al tratar de frenar la agresión, G. D., M.P. y M.C.O., para los que la Fiscalía solicita también indemnizaciones por las lesiones.