EFE
La Guardia Civil ha detenido a cuatro personas por un presunto delito de tráfico de drogas cuando iban a visitar a sus familiares presos en Ocaña I y Ocaña II, a quienes los perros del Servicio Cinológico detectaron que llevaban en el intestino once bellotas de hachís con un peso de 85 gramos.
Según ha informado la Delegación del Gobierno, las detenciones se produjeron después de que la Guardia Civil informara a todos aquellos que querían acceder al interior de estas prisiones de la prohibición de entrar con drogas durante la comunicación vis a vis con los internos.Pero, el perro detector de drogas de la Guardia Civil marcó a cuatro personas como posibles portadoras de sustancias ilegales, tres de ellas en el centro de Ocaña-II y otra en Ocaña-I.Realizadas las comprobaciones necesarias, se demostró que estas personas portaban distintas cantidades de hachís cada una, procediendo la Guardia Civil a la inmediata detención de M.A.L.O., de nacionalidad colombiana, y a F.M.R., M.F.P. yS.R.M. de nacionalidad española, con edades comprendidas entre los 35 y los 57 años, por un delito de tráfico de drogas.Las personas que desean comunicar con los internos de los centros penitenciarios son informadas de que antes de realizar la comunicación con el interno existen taquillas con cerradura para depositar cualquier tipo de objeto o sustancia no permitida en el interior del citado centro.Igualmente a estas visitas se les pone en conocimiento que antes de acceder al interior tienen que pasar por un control realizado por Agentes de la Guardia Civil con un perro de estupefacientes y de las consecuencias que supondría hallarlas en posesión de alguna sustancia prohibida
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