
Capilla es un granadino de 43 años que un buen día se echó la mochila a la espalda y comenzó a recorrer mundo, hasta que decidió que quería ser montañero de la Guardia Civil y se presentó a las oposiciones, pero con 25 años se le había pasado la edad para esa especialidad. Y como lo más cercano a Granada era Toledo… Pues hasta la capital regional que se vino. Y está encantado.
Experto en relaciones públicas y protocolo, siempre se ha mostrado dispuesto a facilitar toda la información que se puede a los medios de comunicación. Cuanta más y más clara se dé, mejor. Y es de los que habla claro, muy clarito. Leal a sus principios y amante de su profesión, de Capilla sí se puede decir que es un guardia civil atípico: le encantan la historia, las plantas, el tiro con arco, la cetrería, la guitarra, el piano…
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