Al pequeño Álvaro lo desahució la sanidad pública hace unos meses. El hospital madrileño al que se derivó a este niño de 5 años tiró la toalla cuando se le reprodujo el tumor cerebral. Pero si los médicos del centro al que lo envió el Sescam se rindieron, su madre, Mari Carmen Ruiz, no. Ella se negó a que su hijo regresara a Albacete con cuidados paliativos. Esta 'madre coraje' pidió más opiniones y no paró hasta encontrar un hospital que sí se atrevía a afrontar el caso de su hijo.
En cuanto Mari Carmen vio un rayo de esperanza, empezó una lucha que aún hoy continúa, pero con el mejor de los resultados. El niño se levantaba ayer a las ocho de la mañana y pedía a sus padres que lo llevaran al colegio. Desde que empezara el calvario de la lucha contra el cáncer, cuando solo tenía 19 meses, los padres no lo habían visto como ahora, contento, con ganas de jugar y con autonomía. Y es que el tratamiento que está recibiendo en un hospital madrileño de la sanidad privada está funcionando.
Los tumores se han reducido y la madre incluso confía en que no sea necesario entrar de nuevo al quirófano.
Milagros
Pero en el caso de Álvaro no hay solo un milagro. Por un lado está la mejoría del pequeño, que es evidente para todos los que lo rodean, y por otro está la respuesta ciudadana. Si el niño sigue en tratamiento es gracias a que se abrió una cuenta corriente pidiendo ayuda y a día de hoy cuenta con 13.000 euros.
El padre del niño está en paro, el sueldo de la madre no llega a los mil euros y son cuatro hermanos en total, por lo que los tratamientos en Madrid eran inviables. Para la biopsia inicial y los tratamientos posteriores, los padres tuvieron que hacer un depósito de 15.000 euros. De hecho, hoy mismo viajarán a Madrid para un nuevo ciclo de quimioterapia y tendrán que ingresar 2.000 euros.
Mari Carmen hubiese sacado dinero hasta de debajo de las piedras con tal de darle una oportunidad a su hijo, pero fue su hermana, Almudena Ruiz, quien se puso en contacto con este diario en verano y se encargó de empapelar Albacete con la fotografía del niño y la descripción de la situación. Desde entonces, las ayudas económicas han sido un goteo constante que han permitido que, a día de hoy, Álvaro haya vuelto al colegio.
De momento, el primer asalto al cáncer ya se lo han ganado, tanto él como su madre. «Si me hubiese estado quieta mi hijo ahora estaría muerto», decía ayer a este diario.
Este mismo viernes, la asociación Afadmu de Munera, que conoce el caso de Álvaro, celebrará a las ocho de la tarde una gala solidaria.
La asociación ya ha informado a sus vecinos de que, en vista de que la sanidad pública no cubre este caso, pensó en contar con la colaboración de la compañía de danza Sándalo para celebrar el festival y entregar la recaudación a los padres de Álvaro.
Fue este verano cuando la familia abrió un nuevo frente en las redes sociales y empapeló las calles. Desde entonces, esperan que la sanidad pública se haga cargo de su pequeño paciente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario