La Caravana de José María Barreda ha parado en la localidad ciudadrealeña de Manzanares. En el Gran Teatro se ha reunido con el candidato a la Alcaldía, Julián Nieva y un anfiteatro lleno de vecinos que aclamaron a Barreda con gritos de: ¡Presidente! Interrumpido por una manzanareña con un “¡porque vales mucho!”, Barreda ha expresado que los ciudadanos no quieren que los políticos se enfrenten y lo “que esperan de nosotros” es que “resolvamos sus problemas” y dar soluciones, dar respuesta a las situaciones más graves y apremiantes.
Una vez más, interrumpían el mitin de Barreda en el momento que se hablaba de los Pactos a los que se había llegado en Castilla-La Mancha. El candidato socialista explicaba que María Dolores de Cospedal no apoyó ni el Pacto por Castilla-La Mancha, ni el Pacto por el Agua, un vecino de la localidad exclamaba: “¡Cobrar sí que cobra!”, y ha insistido: “¡Que trabaje que es lo que tiene que hacer!".
El candidato a la reelección ha explicado que se están trabajando “sin improvisar”, ejecutando una estrategia concebida que consiste en convertir la posición geográfica de Castilla-La Mancha en una ventaja económica. Para ello había que mejorar las comunicaciones y se ha trazado una malla de autovías que hace que el 90% de la población de Castilla –La Mancha viva al lado de una autovía o autopista o a 30 minutos de una estación de Alta Velocidad.
“No estamos parados” y, entre otras cosas, ha asegurado que están comprometidos con los que más lo necesitan. La consecuencia “más dolorosa” de la crisis que “nosotros no generamos” es el paro y desempleo. “Estamos cerca de quienes lo padecen”. Así, asegura, “no nos tienen que explicar cómo se siente un parado”. A ellos hay que decirles que “tenemos que seguir haciendo un trabajo importante”.
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