La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Albacete juzgará el jueves 26 de febrero a J.C.S.R., acusado de un presunto delito de estafa continuada, por el que la Fiscalía le pide cuatro años de cárcel, así como la indemnización a los perjudicados por un importe global de 86.650,09 euros.
Según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press, a principios de 2012, el acusado, propietario de un gimnasio y sin intención de devolver el importe de las cantidades recibidas, contactó con un cliente habitual y le ofreció la posibilidad de ser accionista.
Este le entregó, en dos pagos, 6.400 euros, y, cuando el perjudicado le reclamó que le devolviera el dinero, le hizo un talón por 7.000 euros que no pudo cobrar porque la cuenta estaba sin fondos.
A lo largo de los años 2011 y 2012 actuó de forma similar con varios clientes. A uno le pidió 32.000 euros, alegando que tenía que realizar pagos urgentes, que dijo devolver con pagarés, pero que tampoco pudo cobrar el perjudicado al no haber fondos en la cuenta. A otro perjudicado le solicitó 10.000 euros, con el argumento de asociarse para abrir un nuevo gimnasio.
Así actuó sucesivamente hasta acumular dinero que no devolvió, con pretextos falsos, a ocho personas o entidades por un importe total de más de 86.000 euros, que ahora el Fiscal pide que devuelva a los perjudicados en forma de indemnizaciones.
Según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press, a principios de 2012, el acusado, propietario de un gimnasio y sin intención de devolver el importe de las cantidades recibidas, contactó con un cliente habitual y le ofreció la posibilidad de ser accionista.
Este le entregó, en dos pagos, 6.400 euros, y, cuando el perjudicado le reclamó que le devolviera el dinero, le hizo un talón por 7.000 euros que no pudo cobrar porque la cuenta estaba sin fondos.
A lo largo de los años 2011 y 2012 actuó de forma similar con varios clientes. A uno le pidió 32.000 euros, alegando que tenía que realizar pagos urgentes, que dijo devolver con pagarés, pero que tampoco pudo cobrar el perjudicado al no haber fondos en la cuenta. A otro perjudicado le solicitó 10.000 euros, con el argumento de asociarse para abrir un nuevo gimnasio.
Así actuó sucesivamente hasta acumular dinero que no devolvió, con pretextos falsos, a ocho personas o entidades por un importe total de más de 86.000 euros, que ahora el Fiscal pide que devuelva a los perjudicados en forma de indemnizaciones.
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